SOBICAIN
Centro Bíblico San Pablo
SOBICAIN / Centro Bíblico San Pablo
Príncipes asiáticos franquean el “muro del príncipe” y aprovechándose de las técnicas militares que habían copiado de los indoeuropeos, en particular el carro tirado por dos caballos, arruinan el Imperio medio, avanzan hasta el Egipto medio, y sólo le dejan a los faraones el valle superior del Nilo.
En el norte de la Mesopotamia se impone por algunos años un jefe de bandas que reúne bajo su autoridad Asiria y Babilonia septentrional. Pero, una vez más, la tentativa es de corta duración; al cabo de 50 años, Hamurabi, príncipe amorita –perteneciente a esos nómades que, saliendo de las tierras desérticas, se abalanzaban sobre los países civilizados del Cercano Oriente desde el comienzo del segundo milenio– funda el primer imperio babilónico.
Aparece entonces en Anatolia (Asia Menor) una tercera gran potencia, el Antiguo Imperio hitita, nacido de la fusión entre los indígenas y los indoeuropeos que estaban ya en la región desde el comienzo de ese segundo milenio.